Cuando en mi adolescencia y juventud,
transitaba por la soledad de no encajar y la frustración de no entender,
cuando el incumplible mandato de socializar era un estigma insoslayable,
la poesía hecha música fue refugio de mi alma atormentada.
Y en una época sin internet, sin ipod, celular, ni mp3, fatigaba mis pocos vinilos una y otra vez, desgravando las letras que trascribía en pequeñas libretas para llevarlas conmigo y poder así de alguna manera recrearlas.
En recuerdo de esa época oscura, comparto con ustedes unos versos de Vicentico, “Resistiré”
Cuando pierda todas las partidas
Cuando duerma con la soledad
Cuando se me cierren las salidas
Y la noche no me deje en paz
Cuando sienta miedo del silencio
Cuando cueste mantenerse en pie
Cuando se revelen los recuerdos
Y me pongan contra la pared
Resistiré erguido frente a todo
Me volveré de hierro para endurecer la piel
Y aunque los vientos de la vida soplen fuerte
Soy como el junco que se dobla
pero siempre sigue en pie
transitaba por la soledad de no encajar y la frustración de no entender,
cuando el incumplible mandato de socializar era un estigma insoslayable,
la poesía hecha música fue refugio de mi alma atormentada.
Y en una época sin internet, sin ipod, celular, ni mp3, fatigaba mis pocos vinilos una y otra vez, desgravando las letras que trascribía en pequeñas libretas para llevarlas conmigo y poder así de alguna manera recrearlas.
En recuerdo de esa época oscura, comparto con ustedes unos versos de Vicentico, “Resistiré”
Cuando pierda todas las partidas
Cuando duerma con la soledad
Cuando se me cierren las salidas
Y la noche no me deje en paz
Cuando sienta miedo del silencio
Cuando cueste mantenerse en pie
Cuando se revelen los recuerdos
Y me pongan contra la pared
Resistiré erguido frente a todo
Me volveré de hierro para endurecer la piel
Y aunque los vientos de la vida soplen fuerte
Soy como el junco que se dobla
pero siempre sigue en pie