Qué cosas tiene la vida...
La verdad antes de conocer a Diver (y bueno, creo que nada ha cambiado xD) era muy tímido. La verdad es que respecto al amor soy bastante más romántico (toda una ironía porque no me reconozco así, aunque sí muy cariñoso con confianza) en el sentido de que en mí el amor a una chica me perdura más que lo que puedan pensar otras personas sobre sus propios enamoramientos. Puedo distinguir perfectamente con quién sólo accedería a un one-night-stand y con quién querría una relación estable. Estas últimas me comen más el coco, claro XD
Las dos primeras veces se lo llegué a confesar a gente ajena, por lo que salí mal parado. Las dos siguientes me callé, y una de ellas (la última), no sé que se le pasó por la cabeza de "tirarme fichas" a pesar de que ella tenía novio, hasta el punto de que quería quedar conmigo incluso, pero todo esto era vacilándome, claro, y un despiporre porque la gente me preguntaba incluso si había ido a su casa
También algunos piropos sin venir a cuento a lo largo de mi vida, y no, no era mi madre xD
Y bueno, llegué a conocer a mi Diver-tida y maravillosa novia actual, como os ha explicado, en el antiguo foro de Asperger, ya desaparecido.
He de confesar una cosa. Las mujeres me fascinan. No me malinterpretéis, pero se nos puede hacer muy difícil averiguar qué os pasa por la cabeza
Leí libros de PUAs y también parte del Sexcode de Mario Luna (600 páginas
) y demás cosillas, como artículos de sexualidad y de diferencias de género. Eran ciertamente interesantes, pero la vida real marca la diferencia de cómo tendría que actuar, de forma más intuitiva, ya que hacer caso de cada cosa que te dicen me pondría nervioso...
--------------------------------------------------------------------------------------------
Yo recomiendo que en asuntos de amor os dejéis llevar, seáis parte activa o pasiva, pero siempre coquetead que ya no tenemos 10 años para soltarle la bomba y que se ría el colegio entero xD
Mucha suerte a todos en el amor, porque es cierto que hay que ser responsables, lo necesario con nosotros mismos para no hacer daño a la otra persona.